Pasos simples para obtener el mejor resultado.
Usar tabletas concentradas es muy fácil, pero hacerlo correctamente marca la diferencia. Preparar bien la solución asegura el máximo rendimiento y una limpieza más efectiva.
Paso 1: elegir el recipiente adecuado
Usá una botella o pulverizador limpio y reutilizable. Es importante que no tenga residuos de otros productos para evitar reacciones químicas o pérdida de eficacia.
Paso 2: agregar el agua correcta
Colocá la cantidad de agua recomendada, generalmente entre 500 ml y 1 litro. El agua tibia ayuda a que la tableta se disuelva más rápido y de forma uniforme.
Paso 3: disolver y agitar suavemente
Dejá que la tableta se disuelva completamente. Luego agitá el envase para asegurar una mezcla homogénea. En pocos minutos tendrás tu limpiador listo.
Paso 4: usar y reutilizar
Una vez lista la mezcla, podés usarla como cualquier producto líquido. Cuando se termine, solo tenés que volver a cargar agua y otra tableta.
👉 Preparar tus soluciones es tan simple como agregar, disolver y limpiar.
